Cuando llegué había comenzado la actuación de Cristina Pato, la gaitera gallega que hace una música con mucha energía, partiendo de la música tradicional y adentrandose en el rock.
Luego vi la actuación de 08001, una banda multicultural que toma el nombre del código postal del barrio del Rabal de Barcelona, que es donde residen. Tocaron temas de su próximo disco "Vorágine".
Y por último vi la actuación de Kiko Veneno, uno de los artistas españoles que más admiro, que a finales de los 70, junto a los hermanos Amador con los que formó el grupo Veneno, revolucionó el mundo del flamenco introduciendo aires del rock, que traía de su estancia en Estados Unidos.
Desde entonces ha tenido una extensísima carrera hasta nuestros días, cuyos últimos trabajos han sido "El hombre invisible" publicado en el 2005, y la participación en el supergrupo G-5, junto a Tomasito, Los Delinqüentes y Muchachito Bombo Infierno.
Fue un concierto multitudinario, y Kiko hizo disfrutar al personal interpretando temas de todas sus etapas, finalizando con su clásico "Volando voy".