Londres (VII)

Siguiendo mi huida del gentío del mercado de Portobello he ido por Westbourne Grove, donde se han instalado las tiendas outlet de afamados diseñadores, como Ralph Lauren o Heidi Klein.


Luego seguí por Queensway, donde vi esta curiosa churreria española y Whiteleys, los primeros grandes almacenes de Londres inaugurados en 1911. Un interesante edificio de arquitectura eduardiana y que hoy acoge un centro comercial.


Crucé por Kengsington Gardens, y aunque no me detuve mucho rato, pasé junto a lo que fue la residencia de la princesa Diana de Gales, y pude ver los estupendos jardines que tienen allí.


De allí tomé un autobús hasta Picadilly Circus, la famosa plaza situada en el West End. Construida en 1819, su proximidad a las principales zonas de compras y entretenimiento han hecho de Piccadilly Circus un importante punto de encuentro y una atracción turística en sí misma. Son famosísimas sus grandes pantallas de vídeo y sus vallas publicitarias hechas de neón, así como por la fuente en memoria de Shaftesbury y la estatua conocida como Eros.


De allí me fui hacía Buckingham Palace. Antes de llegar vi un puesto donde estaban unos guardias haciendo eso, guardia. Y los pobre tenían que soportar hordas de turistas haciéndoles fotos, poniéndose a su lado, ... pobrecillos.


Y ya llegué a Buckingham Palace, la residencia oficial del monarca británico en Londres. El palacio es usado para ceremonias y visitas de Estado, visitas turísticas y como residencia por parte de Isabel II. Su actual fachada principal se construyó en 1913 y frente a él está el monumento a la Reina Victoria. Ese día ondeaba la "Union Jack", lo que significa que la soberana no estaba allí.