Esta son unas vistas nocturnas de la ciudad desde el barco que me llevaba a Ancona.


Allí llegué a las 7 de la mañana, y cogí un tren que cruzaba Italia hasta Roma. Un viaje muy bonito entre montañas.


Llegué a Roma a mediodia, me fui a dar una vuelta. Comí en una pizzeria tipica, de las que venden la pizza a peso, estuve por un mercadillo, y de ahi a aeropuerto a coger al avion a Valencia.



5 comentarios:
Hay, que te veo en los Madriles ya mismo, ya mismo, yamismo, YAMISMO, dándome envidia de todas las cosas que vas a hacer.
Besos
Que buena la pizza italiana.
Adhará: Pues eso parece, ya veremos cuando puede ser.
Fanmakimaki: Si, buenisima. Era de mozzarella a bolas, y tomate al horno, con albahaca, riquisima.
De verdad, entre tú y FanMa vais a acabar conmigo a disgustos: VAYA VIDORRA VIAJERA QUE OS PEGAIS CARIS!!
Y sí, lo reconozco: QUÉ MALA ES LA ENVIDIA!
Masmi, darling: feliz año!
Bueno, bueno. Que yo desde que he vuelto de este viaje no he ido a ningun sitio. Y ya veremos este año si voy a algun lado. Bueno, algun viajecillo habra que hacer aunque sea cerca.
Publicar un comentario